De vez en cuando
asesino un pensamiento
trato de no verlo
intento evitarlo
me escapo dando la vuelta
a la manzana de la divagación
Pienso en otra cosa
miro un libro interesante
que finalmente no me interesa.
Le veo doblar la esquina sonriendo
sabiendo que
no puedo dejar de pensarle.
Camina con indolencia andrógina
por la plaza de mi mente
un poco de sensualidad
otro tanto de chulería.
No quiero
ni tan siquiera deseo pensar
estoy cansada de divagar
de oír y lanzar discursos vacíos
palabrerías absurdas sin acciones.
No quiero entrar en esa dinámica
que me asquea y me aburre.
Vuelve a reírse de mi
su carcajada retumba en mi cerebro
no quiero hacerle daño, es mio.
Insiste....insiste
pongo música.....
Reviento el volumen... y....¡lo mato!
Mabel Escribano
Derechos Reservados
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