la esperanza de habitar en ti
en mi mano la maleta del amor
que no pesa,
y en mis ojos
la dirección de tu cara
diciendo mi nombre
mientras llamo al portal de tu bocaY tiemblo
en el encuentro
imaginado mil veces
borrado y vuelta a imaginar
modificándolo
como si la forma de amar
fuese pieza
que se moviese a voluntad.
No sé lo que haré cuando te vea
si caerá el cielo de tus manos
sobre las mías,
si será más grande mi deseo
que mi prudencia
no se...no se,,,
Pero se
que ahora mismo
no hay espacio que no saltara
por aferrar tu cuerpo al mío
por desnudarte toda
mostrándote el tacto de este deseo
que acuña tu nombre
en mi piel
sobre la cama
ansiada de tus brazos.
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