mis entrañas, ahogo tus gemidos con mi boca y pienso morir, entre el trueno y el rayo entre la lluvia y el arco-iris.
Por desfiladeros corre mi sangre,
hierve empujando al corazón,
y su latido es percusión salvaje
en frenético ritmo.
Se apaga el cielo
las nubes negras nos ceden el lecho,
almohadones de ánades,
donde orgulloso el placer se estremece.
Elevamos el mar
despertando el sumerjido volcán
hierve el agua generando tierra nueva.
Abrazo al amor
en el amor mismo,
sacando de mi, lo poco que es mío
para entregártelo.
Me encantó este poema. Me gusta la forma en la que los cuerpos y la naturaleza interactúan y se mezclan... con el deseo profundo que supera la igualdad o la diferencia biológica. Te invito a que nos sigamos y nos leamos. http://diversidadsexualeidentidad.blogspot.com/
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