TENGO

Tengo mariposas en el alma
se escapan
revolotean y emigran
de un lado al otro de mi cuerpo
como si de una posada se tratase.

Vacío los cuartos
de inútiles recuerdos
y limpio los cristales del llanto
de un pasado que lastra
cualquier intento de alquiler
a un nuevo inquilino.

Tengo espinas en las manos
rosas azules,
camaras nupciales sin estrenar
ausentes de amor
lánguidas cortinas
dintel de un lecho blanco
falto de calor
sin gemidos
ni luchas simuladas
en un juego sutil
e iniciático.

Tengo un anuncio en blanco
sin producto
limpio de todo
bueno para casi nada
pero es mío
y le cuido,
le acuno
para que no se sienta distinto
para que no vea como
le señalan por raro.

Tengo un amor tan grande
que no me atrevo a llamarle
por su nombre
lo toco y me aparto
para no quitarle el sol
que no se me muera
de nube gris
de otoño prematuro
de atardecer inexistente.

Tengo la nada
colgada al cuello
de mi camisa
me acaricia y me canta
la canción de siempre
¿”Quien te quiere a ti, morena…?
¿”Quien te quiere a ti…salada….?

Y tengo la vida
rondándome
enamorándome
enamorada…
desnuda
sobre mi piel
en nuestra cama.